Cómo escoger la hidrolimpiadora perfecta
La hidrolimpiadora se caracteriza por tener un sistema que toma el agua a baja presión de su depósito y, mediante una bomba, lo expulsa a gran presión a través de una manguera especial, con la que se puede controlar el paso del agua mediante una pistola. Esta pistola tiene una boquilla muy reducida en su extremo, donde pasa el agua, de esta manera, el agua es expulsada a mayor velocidad.
Las ventajas que obtenemos al limpiar con agua a presión son muchas; ahorramos agua y tiempo, al necesitar menos esfuerzo para desincrustar la suciedad, gracias a la velocidad a la que es expulsada. Además, la máquina es fácil de transportar y de manejar, por lo que, se puede emplear para cualquier zona: tejados, patios, jardines, garajes, fachadas, etc.
¿Cómo elegimos la mejor hidrolimpiadora entre tantas opciones?
Aunque cada persona tiene sus gustos y prioridades a la hora de elegir un producto, es posible concretar algunas características, para así, poder elegir la hidrolimpiadora adecuada:
-Que sea eléctrica, en lugar de a gasolina, ya que, tienen mayor durabilidad, su sistema de refrigeración y la optimización de su motor alargan la vida útil, aunque siempre tienen que estar conectadas a la toma de corriente.
-Que cuente con una manguera de gran longitud, de esta forma, la autonomía será mayor, aunque la máquina tenga que estar conectada a la corriente.
-Que ofrezca un buen sistema de presión regulable. En función de lo que se quiera limpiar, se necesitará un tipo de presión más fuerte o más bajo, por eso, es importante escoger una máquina de agua a presión que pueda regularse.
Por último, si estamos decididos a comprar una hidrolimpiadora, no hay que olvidar la importancia de un buen uso y mantenimiento para que no se estropee. Algunos fabricantes recomiendan no emplear agua caliente, ya que puede estropear el mecanismo.